El 10 de noviembre de 2023, dos días después de que los republicanos sufrieran una derrota en las elecciones intermedias debido a su oposición a los derechos al aborto, los líderes del Partido Republicano en el Capitolio parecían no haber recibido el mensaje. Intentaron utilizar un proyecto de ley de gastos de servicios financieros para socavar una ley del Distrito de Columbia destinada a proteger a los empleados de la discriminación por buscar servicios anticonceptivos o de aborto. Sin embargo, minutos antes de la votación, los republicanos se vieron obligados a retirar la legislación del pleno. Los legisladores republicanos de corriente principal, preocupados de que la oposición de su partido a los derechos al aborto haya alienado a las mujeres, parecían no estar dispuestos a apoyar la restricción relacionada con el aborto, lo que debilitó la medida y le restó los votos necesarios para su aprobación.
División entre los Republicanos
La profunda división entre los republicanos ha impedido que se unan en una estrategia para evitar un cierre del gobierno. Por un lado, hay un pequeño grupo de republicanos en el Congreso que intenta alejarse de un mensaje antiaborto que los votantes han rechazado. Por otro lado, hay una coalición mucho más grande, que incluye a los líderes del partido, que está reafirmando su postura en contra del aborto.
Los resultados de las elecciones del martes dejaron en claro a algunos republicanos en el Congreso lo que ya sabían y temían: que su partido ha alienado a bloques críticos de votantes con sus políticas y mensajes, especialmente en relación al aborto. Y los resultados han fortalecido su determinación de resistir tales medidas, incluso si eso significa romper con el partido en un momento crítico en una lucha de alto riesgo sobre el gasto federal.
Resistencia de los Republicanos Moderados
Dada la pequeña mayoría republicana, que les permite perder solo cuatro votos si todos los demócratas se presentan y se unen en oposición, esta resistencia podría ser decisiva. Los republicanos moderados se resisten a la disposición relacionada con el aborto en el proyecto de ley de servicios financieros y están cada vez más descontentos con el hecho de que la legislación no incluye una medida que prohíba la financiación de un nuevo edificio del FBI. Esto dejó en claro que el proyecto de ley no tenía los votos necesarios.
Representante John Duarte de California, un republicano que representa a un distrito que el presidente Biden ganó en 2020, dijo: "El pueblo estadounidense está hablando muy claramente: no hay apetito por una ley nacional sobre el aborto. Y hay suficientes de nosotros en el Partido Republicano que nos opondremos a ello".
Representante Brian Fitzpatrick, republicano de Pensilvania, también se opuso al proyecto de ley de servicios financieros debido al lenguaje relacionado con el aborto.
División en la Cámara de Representantes
En la Cámara de Representantes, la división entre los republicanos es evidente. La reorganización de los distritos electorales ha hecho que la mayoría de los escaños republicanos sean seguros, lo que lleva a los legisladores a atender constantemente a la ala derecha de su partido. Esto ha llevado a que los republicanos de distritos competitivos tomen votos políticamente peligrosos que muchos temen que les cuesten sus escaños, así como la mayoría de la Cámara, el próximo año.
El Aborto como un Tema Político Potente
Los resultados de las elecciones demostraron que el aborto sigue siendo el tema político más potente para los demócratas, incluso cuando el aborto en sí no estaba en la boleta electoral. En Kentucky, el gobernador demócrata Andy Beshear ganó después de criticar la defensa de su oponente republicano de la prohibición casi total del aborto en el estado. Y en Virginia, los candidatos legislativos que se opusieron a la prohibición del aborto a las 15 semanas propuesta por el gobernador republicano Glenn Youngkin prevalecieron.
Obstáculos Futuros
Los principales legisladores republicanos de la Cámara de Representantes planean presentar un proyecto de ley que financie el Departamento de Trabajo y el Departamento de Salud y Servicios Humanos, el cual incluye múltiples medidas antiaborto. Los demócratas argumentan que estas medidas tienen como objetivo desfinanciar a Planned Parenthood y dificultar el acceso a los fondos del Título X, el programa nacional de planificación familiar. La legislación también apuntaría a programas que brindan referencias o información sobre el aborto.
Es exactamente el tipo de legislación que los republicanos moderados, como el representante John Duarte, están advirtiendo en contra. "Muchos de nosotros en distritos competitivos, muchos de nosotros que queremos ser muy respetuosos con la posición del pueblo estadounidense sobre estos temas sociales, estamos defendiendo nuestra postura", dijo Duarte.
En resumen, la profunda división entre los republicanos en la Cámara de Representantes en relación al aborto ha llevado a la resistencia de los legisladores moderados y ha dificultado que el partido se una en una estrategia para evitar un cierre del gobierno. Los resultados de las elecciones intermedias han dejado en claro que el tema del aborto sigue siendo políticamente potente y que los republicanos están luchando por encontrar un enfoque unificado en este tema.